Nace el primer mercado ecológico y solidario de Euskadi


El pasado 10 de febrero se celebró la inauguración de Koopera Merkatua, el Mercado Ecológico y Solidario de Bilbao. La Red Social Koopera es la promotora de esta iniciativa pionera que aúna el consumo sostenible, la defensa del medio ambiente y la integración social y laboral.

Durante la inauguración, la directora de Marketing de Koopera, Cristina Larrayoz, explicó los principios fundamentales de este proyecto: “Koopera Merkatua quiere ser un espacio de encuentro abierto a la ciudadanía, siendo un lugar en el que se ejerza la economía solidaria. Un lugar en el que todas las realidades sociales convivan: trabajadoras y trabajadores, clientas y clientes, voluntarias y voluntarios, personas que reciben donaciones, instituciones públicas, centros educativos, etc.”

Koopera Merkatua cuenta con más de 800 metros cuadrados dedicados en su mayor parte a la comercialización integral de productos solidarios, justos y ecológicos. La iniciativa apuesta por la alimentación ecológica para apoyar a los agricultores, garantizar la defensa de la biodiversidad y reforzar el mercado local. Además, se ofrece una amplia gama de productos de comercio justo con el objetivo de favorecer a los productores de los países del Sur.

El reciclaje tiene también una importante presencia en el mercado, donde es posible encontrar multitud de productos recuperados, como por ejemplo juguetes, electrodomésticos, libros, artículos de bazar, ropa y complementos. Estos productos recuperados se venden a un precio muy inferior a los de primera mano, lo que permite que personas con diferentes rentas puedan cubrir sus necesidades básicas. “Queremos integrar a todo tipo de públicos” señala Elixabete Arbe, técnica de comunicación de Koopera.

Otro de los objetivos del mercado es crear un punto de encuentro y participación ciudadana que permita difundir acciones de sensibilización medioambiental y social. Para ello dispone de una sala polivalente destinada a la realización de exposiciones y conferencias públicas que se centrarán principalmente en el medioambiente, la ecoinnovación y la economía solidaria. También se organizarán actividades culturales y de ocio alternativas. Paralelamente, Koopera Merkatua va a desarrollar un programa de visitas guiadas a centros educativos en torno a la segunda de las Tres Erres (Reducción, Reutilización y Reciclaje).

Por último, Koopera Merkatua es “un espacio para la integración sociolaboral”,como destaca Arbe. Nada más abrir se han creado 17 nuevos puestos de trabajo en el mercado, ocho de ellos de inserción. Para esta labor están las dos aulas de formación existentes, en las que van a impartirse talleres de empleo y prácticas en colaboración con otros agentes sociales y enfocados principalmente a personas en situación o en riesgo de exclusión social. Los cursos se dirigirán a sectores en lo que se están dando nuevos nichos de empleo y serán complementados con la realización de prácticas laborales en las tiendas del propio mercado.

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Ante tanto dolor no tenido en cuenta, tanto espacio conquistado y herido, tanto desequilibrio nacido de nuestras contradicciones, ante el abismo entre lo que la vida impulsa y la realidad a la que sobrevivimos, ante tanto parecer malversado, tanta diferencia discriminada, tanto intento aplacado, tanta claudicación "a lo inevitable", tanto consentimiento a la impotencia, ... ¿le queda algo al ser humano por decir?

El alfabeto chino emplea el mismo carácter para nombrar crisis y oportunidad. Algo debe haber, porque lo cierto es que hasta la naturaleza nos lo muestra: el calor dilata nuestros sentidos, nos adormece sumiéndonos en una suerte de inercia en la que nada parece reclamar nuestra voluntad y nuestra acción. El frío, en cambio, nos hace despertar, ponernos en pie, estar alerta, prepararnos. La imprescindible mirada crítica a la aclaparadora realidad actual no ha de dejarnos tuertos en el intento cotidiano de equilibrios constantes porque la realidad, que es mucho más amplia, al poder no le interesa mostrar completa, no vaya a ser que la esperanza despierte y nos haga creer que de verdad otro mundo es posible.

En el éxodo hacia la felicidad nos hemos perdido a nosotros mismos por el camino. Por eso es hora de despertar, de poner en marcha iniciativas (combinando criterios ecológicos y justicia social, por ejemplo, ¡binomio perfecto!) que muestren que sí, que es posible otra manera de relacionarse, de trabajar, de habitar el planeta, de ser. Gran oportunidad, pues, para abrir espacios a la confianza. ¡No nos dejemos engañar! El miedo es la forma más directa y efectiva de hacerle el juego al poder establecido. Defender la alegría como un bien inalienable, vivir ilusionado, que no iluso, como un acto de resistencia personal y colectivo libre y gratuito, rescata lo mejor de todos nosotros y nos impulsa a acercarnos, a compartir, a crear, a proponer, a ir más allá de la crítica, a construir, a ofrecer respuestas concretas, a caminar, a creer.

Elena Lobo